Una tarde ociosa cualquiera, ayer mismo, urruneando entre los libros de viajes a islas no tan lejanas, de repente...a lo lejos una voz, una guitarra...¡un directo!...¡un tango suave, moderno!...Mariel Martínez...¡dedicado a mí!. Hundido en la silla roja disfruté a dos metros de Mariel, su guitarrista y su bandoneonista...¡que placer inesperado! ¡que regalos caen del cielo!. Ni oí el ruido de vasos, ni los pitidos de la sección de móviles... Solo ellos y yo...y algunos más que también disfutaban y aplaudían... Tocaban con ella Alejandro Picciano (guitarra) y Carlos Quilici (bandoneón). Carlos, que tendrá una entrada aparte, musiqueaba tanto con su cara como con su bandoneón y venía de Rosario (Argentina).
Tiene dos discos grabados esta joven. En youtube podéis ver todo lo que ha subido ella en su canal...y lo que han subido otros. Aquí os dejo su Desencuentro, que lo podéis añadir a anteriores desencuentros.
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